Depresión

La depresión es un trastorno psicológico cuyas tasas de prevalencia han ido en aumento en los últimos tiempos, tal que muchos estudios hablan de que estamos en la época de la depresión, ya que la padecen entre un 9% y un 20% de la población. Cada vez la edad de inicio es más temprana, diagnosticándo más casos entre los 15 y los 19 años. 

En líneas generales, la depresión parte de una percepción o interpretación negativa de la realidad que da lugar a pensamientos distorsionados negativos sobre nosotros mismos, lo que provoca baja autoestima, y también sobre los demás y sobre el futuro. Estos pensamientos hacen que la persona se vuelva pasiva, insegura, y deje de afrontar las situaciones de la vida cotidiana, que de repente se le hacen muy grandes e inabarcables.

 A su vez esta falta de éxito en manejar los problemas reafirma los pensamientos negativos y crea una un sentimiento de tristeza, frustración e impotencia que se retroalimenta.

Tratamiento depresión

Intervención

El punto fundamental de  tratamiento para problemas del estado de ánimo es hacer un previo  análisis funcional, que indica cuáles son las causas y  los procesos psicológicos o pensamientos  que mantienen la depresión, para enfocar la intervención de forma personalizada.

Desde el enfoque cognitivo se trata el problema de raíz, enseñando a la persona a percibir e interpretar los acontecimientos de una forma más realista y positiva, y ayudándole a crear pensamientos alternativos  que fomenten la vitalidad y el afrontamiento de problemas, para cosechar éxitos en vez de fracasos.

Además, esta terapia se complementa con técnicas conductuales, para aumentar  la frecuencia de actividades agradables y reforzantes para la persona  y técnicas interpersonales,  que tienen como objetivo crear o reforzar la red de apoyo social.